Hablemos del suicidio

Aviso de contenido (AC): suicidio, ideaciones suicidas.

Hoy, 10 de septiembre, es el día internacional para la prevención del suicidio. Desde 2003, la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio ha cooperado con la Organización Mundial de la Salud para promover el Día Mundial de la Prevención del Suicidio el 10 de septiembre de cada año, con el objetivo de aumentar la conciencia mundial sobre la prevención del suicidio.

Según datos oficiales:

• En el mundo muere por suicidio una persona cada 40 segundos.
• En España mueren por suicidio 10 personas al día.
• Al año se suicidan unas 700.000 personas en todo el mundo.
• La mortalidad por suicidio es superior a la causada por la guerra y los homicidios.
• El suicidio es la cuarta causa principal de muerte entre personas de 15 a 29 años de edad.
• Cada suicidio afecta, íntima y profundamente, al menos a 6 personas.
• En España, respecto al 2020, los suicidios en 2021 aumentaron un 3,7%.
• Los estudios señalan que en el grupo de edad de las personas mayores cuentan especialmente factores como la depresión, el dolor físico a causa de una enfermedad, el aislamiento social y familiar.

Hay muchos mitos sobre el suicidio así que vamos a desmitificarlos:

• Los intentos de suicidio son una llamada de atención.

FALSO. Un intento de suicidio es una manifestación del sufrimiento y desesperación que siente la persona.

• La mayoría de los suicidios suceden repentinamente, sin advertencia previa. 

FALSO. La mayoría de los suicidios han ido precedidos de signos de advertencia verbal o conductual. Desde luego, algunos suicidios se cometen si advertencia previa. Pero es importante conocer los signos de advertencia y tenerlos presente.

• El suicida está decidido a morir.

FALSO. Por el contrario, los suicidas suelen ser ambivalentes acerca de la vida o la muerte. Alguien puede actuar impulsivamente al beber plaguicidas, por ejemplo, y morir unos pocos días después, aunque hubiera preferido seguir viviendo. El acceso al apoyo emocional en el momento propicio puede prevenir el suicidio.

• Hablar del suicidio es una mala idea y puede interpretarse como estímulo.

FALSO. Dado el estigma generalizado alrededor del suicidio, la mayoría de las personas que contemplan el suicidio no saben con quién hablar. En lugar de fomentar el comportamiento suicida, hablar abiertamente puede dar a una persona otras opciones o tiempo para reflexionar sobre su decisión, previniendo así el suicidio.

• Quien haya sido suicida alguna vez, nunca dejará de serlo.

FALSO. El mayor riesgo de suicidio suele ser de corto plazo y específico según la situación. Aunque los pensamientos suicidas pueden regresar, no son permanentes, y quien haya tenido pensamientos e intentos suicidas puede llevar después una larga vida.

Por lo tanto, el suicidio SÍ se puede evitar y se hace HABLANDO sobre el tema. Tratar el tema con normalidad, hará que si alguien lo está contemplando se atreva a comunicarlo sin sentir que se le está juzgando.